ASODECO y el INTA lanzaron el Programa de Construcción en Madera
El Proyecto se propone capacitar a todas las personas que son acogidas por las instituciones aliadas al Banco de Alimentos, con el objetivo de generar herramientas y capacidades para que los beneficiarios puedan construir en madera muebles de uso cotidiano y viviendas.
El Programa de Construcción en Madera busca disminuir las desigualdades, generar nuevas oportunidades para las personas con menos recursos y una nueva fuente de trabajo.
Es necesario contar tanto con donaciones de la comunidad como con un sistema de padrinos para adquirir los materiales y recursos necesarios para poder llevar a cabo el programa.
La intención es que el proyecto sea visto como una cadena de favores, puesto que cada persona que recibe asistencia debe colaborar con otros para crear una red de beneficios en conjunto.
El programa surge mediante un convenio entre la Asociación para el Desarrollo de Concordia (ASODECO), encargado de coordinar las tareas necesarias con los diferentes actores, profesionales, instituciones y empresas, y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) que impulsa la innovación y la transferencia del conocimiento para el desarrollo del país, y que forma parte del Centro de Desarrollo Foresto Industrial (CeDeFi), institución que se sumó a participar del proyecto.
A través de los conocimientos dictados por los especialistas del INTA, los beneficiarios podrán conocer las características de la madera, aprenderán a utilizar distintas herramientas y estarán en condiciones de construir elementos de uso cotidiano e inclusive una vivienda.
Ciro Mastrandrea, quien además es jefe del Departamento Forestal en Concordia y presidente del Centro de Desarrollo Foresto Industrial (CEDEFI), es el encargado de brindar la capacitación. A partir de los dos talleres que ya se dictaron, uno en Juan XXIII y el otro en Sagrado Corazón; Ciro destacó la importancia de sentirse valorados y transmitir la “cultura del trabajo y la organización”, para que las personas capacitadas sepan que pueden hacer cosas con sus propias manos para ellos y para terceros.
“Lo más enriquecedor fue poder colaborar con comunidades necesitadas, poder transmitir saberes a otras personas y que lo hecho posea una utilidad”, aseguró el ingeniero.
La madera es el recurso disponible con el que cuenta Concordia, mediante el cual se generan conocimientos y habilidades para crear un trabajo sustentable. A través de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) de Concordia, que es miembro activo de ASODECO, se convoca a estudiantes de todas las carreras de la Facultad Regional de Concordia con el objetivo de que apliquen los conocimientos adquiridos en las diferentes carreras y puedan ser actores en proyectos sociales.
Dentro de las tareas a realizar para este programa se encuentran: diseño y despiece de piezas de carpintería y construcción en madera AutoCAD, Autodesk o SketchUp, elaboración de planillas de costos, gestión de cursos, brindar capacitaciones, asistencia en capacitaciones, gestión de insumos y herramientas, logística, organización y redacción de proyectos.
Lourdes Weber es estudiante de la Tecnicatura en Seguridad e Higiene en el trabajo en la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) Facultad Regional Concordia y decidió sumarse al Programa de construcción en madera para poder realizar prácticas de seguridad con el fin de adquirir más conocimientos.
“Mi experiencia fue bastante enriquecedora y agradable, aprendí a comunicarme mejor desde el área de la seguridad, a fomentar más la seguridad a la hora de estar realizando los trabajos y realizar capacitaciones más interactivas, con los voluntarios”, afirmó Lourdes.
A lo largo de los dos días que dura cada taller, las tareas de la estudiante de la UTN son: capacitar a los beneficiarios sobre la seguridad a la hora de usar herramientas y recomendarles las formas más seguras de utilizarlas a la hora de trabajar.
Lourdes destacó que “lo más enriquecedor es la experiencia de trabajar en conjunto con los beneficiarios del lugar y del programa” y, además, aprender a capacitar de manera más interactiva lo cual la hace sentir “que valga la pena estar ahí”.
La estudiante de Ingeniería Civil en la UTN Concordia, Eliana Marisol Martínez, decidió sumarse al programa para enriquecer sus conocimientos sobre madera.
Su experiencia es “muy enriquecedora” en cuanto al aprendizaje que uno se lleva, al trabajo en equipo y al conocimiento de la seguridad e higiene que “muchas veces pasamos por alto”.
Eliana, es la encargada de brindar “asistencia técnica” a un grupo de beneficiarios a los cuales les enseña cómo utilizar herramientas y como se adquiere la madera al momento de comprarla. La estudiante de la UTN recalcó que el objetivo no es construir únicamente mesas y sillas, sino que los beneficiarios lleguen a construir ampliaciones del hogar e inclusive viviendas.
“Las personas solemos clasificarnos por el conocimiento que tenemos: yo enseño, vos aprendés. Sin embargo, el fin del proyecto es yo aprendo, si vos también aprendés”, afirmó Eliana quien destacó el trabajo en equipo del programa.
Los estudiantes, además están siendo capacitados por el Lic. Martín Azzalli, responsable de la Unidad de Vinculación Tecnológica de UTN Concordia, y se encuentran elaborando y presentando proyectos con el objetivo de lograr financiamiento para que el programa pueda crecer.
Desde las instituciones se agradece a las empresas que están haciendo posible este programa a través de sus donaciones de madera y herramientas.
La adhesión por parte de los beneficiarios al programa es voluntaria y cuenta con dos etapas. En primer lugar, la construcción de elementos comunitarios que combina la teoría y la practica con el fin de capacitar al beneficiario en carpintería básica y la construcción de pequeños objetos que quedaran para el uso de la comunidad.
En segundo lugar, el taller teórico-práctico de construcción de viviendas en el cual aprenderán a construir tanto piezas que forman parte de viviendas como viviendas complejas.
El próximo taller estaba previsto dictarse en la localidad de Los Charrúas y había más de treinta inscriptos.