Usuarios entrerrianos pagan la energía hasta un 150% más que en Buenos Aires
El último informe del Área Fiscal y Política Públicas del Instituto Interdisciplinario de Economía Política de Buenos Aires (IIEP), dependiente de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) dio cuenta de las abismales diferencias existentes en el valor de las tarifas eléctricas a nivel nacional y de los elevados valores que se pagan en Entre Ríos en relación al promedio nacional y a los valores promedios más bajos, entre los que se destacan los que se pagan en el Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA), por lo que se reafirma que la provincia tiene una de las tarifas eléctricas más caras del país.
El estudio indica que «en el territorio nacional existe una diferencia tarifaria notable debido a la particularidad de los marcos regulatorios provinciales. En este sentido, si bien el precio de la energía mayorista es igual para todo el país, el costo final por KWh para el usuario final no lo es. Esto se explica, sin contar los impuestos, por las diferencias en el Valor Agregado de Distribución (VAD) que cada distribuidora cobra a sus clientes y que es autorizado por los entes reguladores provinciales excepto en el Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA) que se encuentra bajo jurisdicción nacional».
Asimismo, sostiene que «la segmentación de tarifas le puso aún más complejidad y aumentó la dispersión tarifaria ya que para los diferentes segmentos de usuarios puede variar el lugar donde encontrar la tarifa más baja».
Factura final sin impuesto para un consumo de 300 Kwh/mes
Factura de 300 Kwh/mes Factura de 300 Kwh/mes Factura de 300 Kwh/mes
Usuario N 1 – Altos ingresos Usuario N 2 – Ingresos bajos Usuario N 3 – Ingresos medios
Por otra parte, advierte que «la tarifa promedio del país para un usuario N1 (correspondientea hogares deingresos altos), con datos disponibles a febrero de 2023, es de $5.174 por mes. En este sentido, el valor más bajo por KWh se cobra en Jujuy mientras que el valor más alto es el que reciben los usuarios de Neuquén. En este segmento, la factura más elevada es 2.3 veces mayor a la más baja».
A su vez, refiere que «la tarifa promedio del país para un usuario N 3 (hogares de ingresos medios), es de $3.406. En este caso, el valor más bajo por KWh se cobra en el AMBA (EDESUR) mientras que el valor más alto es el que reciben los usuarios de Neuquén. En este segmento, la factura más elevada es casi 5 veces mayor a la más baja».
Por otra parte, agrega, «la tarifa promedio del país para un usuario N 2 (hogares de bajos ingresos), es de $3.106. En este caso, el valor más bajo por KWh se cobra en Formosa (Cuadro tarifario vigente a enero 4) mientras que el valor más alto es el que reciben los usuarios de Santa Fe. En este segmento, la factura más elevada es 4.1 veces mayor a la más baja».
¿Qué ocurre en Entre Ríos?
De acuerdo al informe, la tarifa promedio para un usuario N 1 en Entre Ríos es de $6171, un 19,26% más elevada que el promedio nacional ($5174 mensuales). En este segmento, en la provincia se paga un 74,37% más que en Jujuy, donde se constata el promedio más bajo para un consumo de 300 Kwh/mes: $3539. En este segmento, el usuario entrerriano paga un 68,56% más que uno de AMBA Edesur ($3661) y un 68,33% más que uno de AMBA Edenor ($3667).
En lo que hace a la tarifa promedio para un usuario N 2, Entre Ríos se encuentra en el noveno puesto, con un valor de $4007, por lo que paga un 124,73% más que uno del AMBA Edsur que es la zona que menos paga ($1783) y un 123,72% más que uno del AMBA Edenor, que es la segunda zona con la tarifa más baja. En este caso, la tarifa pagada en la provincia es un 17,64% más cara que la tarifa promedio nacional ($3406).
El informe también da cuenta que en Entre Ríos el segmento de ingresos más bajos paga una tarifa de $3514; un 13,13% más cara que el promedio ($3106) y un 151,53% más que en Formosa ($1397), donde se registran las tarifas más baratas.
También, paga un 131,03% más que en el AMBA Edesur ($1521) y un 130,12% más que en el AMBA Edenor (1527), que también se suben al podio de las que menos pagan.
Composición de las tarifas
En cuanto a «la composición de las facturas sin impuestos (precios de la energía y VAD) también encuentra cierta variabilidad entre niveles y provincias si bien, en líneas generales, se mantiene la relación que implica que, a mayor factura, mayor porcentaje de VAD», remarca el informe.
De esta manera, prosigue, «en el nivel 1 de altos ingresos, y para el promedio del país, el precio de la energía representa el 54% de la factura, mientras que el 46% lo ocupa el valor de distribución».
Mientras tanto, expresa que «la factura de menor monto observada en Jujuy se compone de un 79% por valor de la energía y 21% por el VAD, mientras que en el nivel 2 esta relación es de 42% y 58% respectivamente para la misma provincia y en el nivel 3 es de 46% y 54% respectivamente en la jurisdicción».
Por otra parte, precisa que «en el caso de la factura de mayor monto, en el nivel 1 de altos ingresos (Neuquén) se compone de un 34% por valor de la energía y 66% por el VAD, mientras que en el nivel 2 esta relación es de 17% y 83% respectivamente para la misma provincia y en el nivel 3 es de 18% y 82% respectivamente en la jurisdicción».
Luego, puntualiza que «en las restantes jurisdicciones se observa la misma situación: mientras más bajo sea el nivel de ingresos, mayor proporción ocupa el VAD y menor proporción el precio de la energía».
Evolución de la tarifa en términos reales
Más adelante, el informe se centra en evolución tarifaria y destaca que «la tarifa media eléctrica del AMBA, equivalente a 300 KWh por mes, se ha reducido en términos reales desde diciembre de 2019. A su vez, los diferentes niveles determinados en el programa de segmentación de subsidios han tenido un comportamiento diferente desde su implementación».
Del mismo modo, apunta que «entre enero de 2019 y agosto de 2023 la tarifa residencial para un consumo promedio se ha reducido 64%. A partir de entonces, la tarifa media para los usuarios del Nivel 2 (bajos ingresos) y nivel 3 (ingresos medios) continuaron su trayectoria decreciente hasta la actualidad, mientras que la factura final para usuarios N1 (altos ingresos) aumentó a partir de la implementación de la segmentación de subsidios. Sin embargo, de no mediar aumento de tarifas en lo que resta del año, se prevé una reducción de la factura en términos reales para los tres niveles de usuarios residenciales».
Relación factura final / salarios
En otro orden, se detalla que «en marzo de 2019 la factura llegó al máximo de la serie con un valor, a la moneda de febrero de 2023, de $7.155. Esto fue equivalente al 3% del salario en aquel mes, medido a partir de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE). En febrero de 2023 la factura media del AMBA para un usuario N 1 es de $4.660 mientras que para un N 3 es de $2.257 y para un N 2 de $1.921».
Por otra parte, destaca que «el último valor publicado del RIPTE, en enero de 2023, indica que en aquel mes las facturas de un usuario N 1, N 2 y N 3 representan el 1,8%, 1% y 1% del RIPTE respectivamente».
Comparación regional
Por último, el estudio informa que «con datos a diciembre de 2022, la comparación regional muestra que la tarifa de energía eléctrica al sector residencial en Argentina se encuentra muy por debajo de sus pares de la región. Por caso, por un consumo de 300 kWh/mes una familia argentina paga casi la mitad que en Brasil y la cuarta parte que en Uruguay».