Familia de Concordia vuelca en Río Negro y muere un nene de 10 años
Viajaba con su familia. Su papá comenzaba a trabajar mañana la cosecha en Villa Regina.
La siempre peligrosa Ruta Nacional 22 se cobró una nueva vida. Esta vez es la de un nene de 10 años que viajaba con su familia desde Concordia hacia el Alto Valle, donde mañana su padre comenzaba con la cosecha de peras y manzanas. El vuelco se produjo en la extensa y peligrosa recta que une Río Colorado con Choele Choel.
Cerca de las 6.30 de la mañana automovilistas que transitaban por el sector llamaron a la Policía por un vuelco ocurrido a unos 20 kilómetros al este de Choele Choel, en la interminable recta de casi 100 kilómetros que une esa localidad con Río Colorado. Desde el hospital de la ciudad enviaron ambulancias para atender a una familia que transitaba en un Renault Logan y sufrieron un vuelco en el kilómetro 971 de la Ruta 22.
Al llegar al lugar, los médicos debieron atender de urgencia a un niño de 10 años quien se encontraba en peor estado como consecuencia del vuelco. Una vez en el hospital, falleció.
También debieron atender al resto de la familia, un matrimonio y otro de sus hijos. Todos son oriundos de Concordia, desde donde habían salido ayer por la tarde y tenían como destino el Alto Valle, más precisamente la localidad de Villa Regina, donde el hombre debía iniciar las tareas de cosecha de pera en una chacra.
Los motivos del accidente se desconocen, pero las primeras informaciones extraoficiales aseguraban que no habían indicios de la participación de otro vehículo en el vuelco.
Por la hora de la mañana en la que sucedió, luego de viajar toda la noche, se estima que quien manejaba el Logan se habría quedado dormido y esto lo llevó a pisar a banquina, una vez allí el auto salió de la cinta asfáltica fuera de control y, luego, comenzó a volcar, según publicó el sitio rionegrino Mejor Informado.
Desde la Policía caminera de Choele Choel se abstuvieron de brindar información, porque en el lugar estaba trabajando los peritos de criminalística, para realizar las medidas correspondientes que permitan dilucidar las causas del siniestro.
Mientras tanto, en Concordia la novedad consternó a los trabajadores del empaque cítrico en que trabajaban miembros de la familia involucrada, a la que identificaron como de apellido Medina.