Amenazaron con descuentos y despidos a trabajadores de Granja Tres Arroyos por realizar asambleas
“Como la empresa vio que hubo convocatoria en las asambleas, comenzó a avanzar y meter miedo y presión”, informó el delegado gremial e integrante de la comisión de relaciones internas del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA) en la planta La China, Maximiliano Salazar. ¿Qué es lo que reclaman los trabajadores?
Los trabajadores de la planta La China de Granja Tres Arroyos, en Concepción del Uruguay, se encuentran realizando asambleas para reclamar la apertura del diálogo con la empresa y así poder tratar cuestiones vinculadas a las condiciones laborales.
“Estamos reclamando contra los despidos y pidiendo un premio anual que se viene perdiendo a través de los años, ya que la empresa no lo quiere pagar más”, explicó Salazar y detalló: “Queremos que nos paguen ese premio o que nos den un reconocimiento por haber trabajado en pandemia, donde muchos compañeros se contagiaron y hoy están sufriendo secuelas”.
En este marco, apuntó que “el reconocimiento que la empresa nos dio fueron siete pollos, lo que tomamos como una burla”, aunque informó que esto “fue aceptado, pero manifestando la disconformidad”.
Por otra parte, el delegado gremial denunció que “cuando los compañeros salen de parte enferma se descuenta el presentismo y un nueve por ciento que se cobra por sobreconvenio”. “La empresa avanza sacándonos este derecho”, sentenció.
Amenazas
“Como la empresa vio que hubo convocatoria en las asambleas, por medio de los encargados y los jefes de planta, comenzaron a avanzar y meter miedo y presión, diciendo que no iban a pagar el día ni presentismo a los que estaban presentes”, informó el delegado gremial a APFDigital. “Además nos manifestaron que iban a despedir gente si seguíamos con las asambleas, por esto, los compañeros de algunos sectores volvieron a sus puestos”, explicó.
“Por eso ahora los delegados decidimos ponernos en el frente de batalla para no perjudicar a los compañeros”, agregó.
Salazar explicó que la empresa continuó con las amenazas y que incluso “trajeron una escribana y un representante de Bienestar Animal para constatar que, supuestamente, por culpa de los delegados los pollos se le estaban muriendo de calor, cosa que no era así”. “Por esto, me hicieron una denuncia penal y me quieren suspender a mí y a otros cinco compañeros”, afirmó.