Tras confirmarse su condena, el exgobernador Urribarri dijo que es “un discurso político para generar impacto mediático”
La Cámara de Casación Penal de Entre Ríos rechazó los planteos realizados por la defensa a la sentencia por negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública, peculado y defraudación a la Administración Pública y confirmó la condena de ochos años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos contra el exgobernador, Sergio Urribarri -quien no dudó en calificar la resolución como “un discurso político”-, además de las correspondientes a su cuñado Juan Pablo Aguilera, al exministro Pedro Báez y las del resto de los acusados.
Se trata de una causa en la que se condenó a Urribarri por disponer de forma ilegal de fondos públicos que en algunos casos terminaron financiando sus campañas electorales; entre otras maniobras, a través de contratos de imprenta y publicidad.
En su fallo del miércoles, la Cámara de Casación al rechazar los planteos de las defensas, sostuvo que toda la prueba fue “legítimamente reunida” y que a los acusados se les garantizó el debido ejercicio de su defensa.
Según el Tribunal, la investigación tuvo pruebas de “un volumen y contenido incriminador pocas veces visto en este tipo de hechos”.
La sentencia confirmada había sido dictada, por unanimidad, el 7 de abril de 2022.
Aguilera es el cuñado de Urribarri y se lo acusó de uno de los delitos contra la administración pública, por ser dueño de las imprentas a la que se giraron los trabajos financiados con dinero público y funcionario a la vez, pero también por ser parte activa de la cartelización de empresas que posibilitó el desvío de fondos.
Urribarri restó valor jurídico a la resolución
Tras el fallo, el exmandatario se despachó en contra de Casación y aseguró que “demuestra que está en campaña electoral”.
“Las inéditas expresiones y las calificaciones de la resolución que escuchamos hoy son propias de un discurso político para generar impacto mediático. Nada tienen de jurídico”, afirmó.
“Tal como lo dije en un video que publiqué en mis redes sociales meses atrás, no esperábamos objetividad, imparcialidad e independencia de parte de la esposa del dirigente del PRO de Concepción del Uruguay, Juan Enrique Ruiz Orrico, ex funcionario del macrismo, candidato a intendente por ese partido y ladero de Frigerio; quien se dedica a agraviarme públicamente, que dice barbaridades sobre mí en los medios de comunicación, que ataca al Kirchnerismo, y que incluso, ha opinado ofensivamente sobre este proceso judicial”, dijo Urribarri.
Tras ello consideró que la jueza Bruzzo “debería haberse excusado y dar un paso al costado, pero no lo hizo”.
“Claramente había una opinión formada, un prejuicio, respecto de mí y de esta causa desde mucho antes de que llegara a sus manos. Una total violación a las garantías constitucionales”, sostuvo Urribarri.
“El fallo que recibimos en primera instancia es absolutamente arbitrario, irracional e infundado. De hecho, la propia fiscal Yedro, en un acto de sincericidio, reconoció que no tenían pruebas ni testigos. La contundencia de esta admisión por parte de la Fiscalía echaba por tierra la acusación y hacía indiscutible el sobreseimiento”, concluyó.
