El eterno retorno: sistema Baggio para destruir trabajo
Entre junio y agosto de 2014, en una demostración de su elevada capacidad de destruir trabajo, argumentando «una baja en la producción», la empresa RPB, fabricante de los jugos Baggio y otros productos, dejó en la calle a 43 trabajadores en Gualeguaychú. Ese mismo año, en febrero, había echado a otros tres trabajadores. En 2016, entre febrero y abril, con la excusa de «cuestiones domiciliarias», la firma se deshizo de sus relaciones laborales con otros cuatro trabajadores.
Ahora, desde el Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación, confirmaron que fueron alrededor de una decena los afectados por la costumbre de la empresa de destruir trabajo.
En este caso, se trata de 10 operarios de su planta de Concordia – que ocupa parte de los predios que fueran de la otrora poderosa Pindapoy- a los que les cercenó el trabajo aduciendo una «reestructuración del personal».
En realidad, tal construcción discursiva esconde las verdaderas causas de los despidos – algunos imaginan que se trata de un coletazo del conflicto familiar para hacerse de la conducción de la empresa– y, en su misma formulación, late la posibilidad de que los que ya no están sean reemplazados por otros.
Finalmente, a la decena que condenaron al patíbulo en Concordia, se sumaría un número aún no confirmado en la sede que RPB tiene en Gualeguaychú.
